EL EXITOSO TELEFÉRICO DE SANTO DOMINGO
En su primer año de operaciones, el teleférico de Santo Domingo de Guzmán, capital de la República Dominicana, ha transportado 4,005,137 pasajeros, lo que arroja un promedio de 11,443 personas diariamente en 12,437 horas de servicio, cubriendo una jornada desde las 06:00 hasta 22:00 horas.
Es una noticia que aparece en la edición impresa No. 5490 del Diario Libre correspondiente al 23 de mayo de 2019, tanto en su portada como en su página 16, bajo la firma de Adalberto de la Rosa, quien adorna su crónica con sendas respuestas (muy simples por cierto) de dos usuarios "agradecidos por el servicio", quedándose el lector con la esperanza de encontrar mayor robustez en una noticia de primera para un periódico de tanta importancia como el Diario Libre, el cual, acaba de alcanzar su mayoría de edad el pasado día 10 de este mismo mes de mayo.
Como he encontrado que, hace mas de un año, el mismo comunicador escribió en ese mismo medio, esta nota, deseo compartirla para que cada quien saque sus propias conclusiones:
"El sistema de Teleférico de Santo Domingo está diseñado para transportar 6,000 pasajeros por hora, unos 54,000 al día, en las 195 cabinas que tendrá, y que girarán constantemente con un promedio de 12 segundos por compartimento.
Así lo informó Jahel Isa, encargado de movilidad de la Unidad para la Readecuación de La Barquita y Entornos (URBE), quien dijo además que cada cabida fue diseñada pensando en personas que se trasladan en sillas de ruedas.
Explicó que el Teleférico nunca se detiene y que el cable que soporta las cabinas se mueve a 18 kilómetros por hora. Dijo que cuando el cable llega a cada estación, el movimiento lo controla un grupo de poleas que reduce la velocidad a 0.22 metros por segundo.
“Estamos sirviendo a una población de 287,000 habitantes y tendremos una cabina cada 12 segundos para que los pasajeros puedan abordar un servicio continuo, digno, cómodo y extremadamente atractivo por la vista sobre el río”, explicó.
Para despejar la duda de ciudadanos que creen que el cable que sostiene y mueve las cabinas está electrificado, Isa aseguró que no, que la única energía con que cuenta cada una son paneles solares que tienen la función de iluminar y para el sistema de comunicación.
Informó que los motores que mueven el cable están en las estaciones de Los Tres Brazos y Sabana Perdida y que es en esos lugares y en cada estación que hay electricidad.
Precisó que el personal del Metro está entrenado para operar el sistema, que es integrado en los aspectos tecnológico, físico y tarifario.
Sostuvo que la Oficina para el Reordenamiento del Transporte (OPRET) cuenta con un sistema de entrenamiento y capacitación muy bueno, mediante el cual su personal es preparado en diferentes áreas.
Recordó que la empresa Pomo, constructora del proyecto, hará la transferencia de conocimiento para la operatividad y asistencia durante los próximos tres años.
Con relación a las familias que serán desalojadas, aclaró que son cuatro viviendas y no 40 como se ha dicho, y es en la estación de Gualey. Aseguró que esta semana se concluirá el proceso con las familias que restan y se procederá a demoler las viviendas."
Estamos viviendo en un momento histórico en que, parece ser el momento más preciso para que se encienda la chispa para que resurja un género de novela realista al estilo de la que fue cultivada en el siglo XIX por Honoré de Balzac en Francia y Benito Pérez Galdós en España, para destacar la realidad de lo que estamos viviendo en este ambiente lleno de subjetivismo romántico que nos pintan hoy sobre nuestra realidad nacional y mañana se vuelve otra cosa radicalmente diferente.
Estamos viviendo en un momento histórico en que, parece ser el momento más preciso para que se encienda la chispa para que resurja un género de novela realista al estilo de la que fue cultivada en el siglo XIX por Honoré de Balzac en Francia y Benito Pérez Galdós en España, para destacar la realidad de lo que estamos viviendo en este ambiente lleno de subjetivismo romántico que nos pintan hoy sobre nuestra realidad nacional y mañana se vuelve otra cosa radicalmente diferente.
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