LOS ECOS DE MI CARPETA
Luego de haber escuchado muchas veces "los ejes de mi carreta", me sigo dando cuenta de que es una expresión que sirve como modelo para responder casi todas las cosas que surgen en el día a día.
Cuando Atahualpa Yupanqui tomó su guitarra y empezó a tratar el tema que le hizo más famoso de lo que era hasta ese momento de su carrera cultural, nadie sabía que a él le llamaban abandonado, tan solo porque no engrasaba los ejes de su carreta.
Pero, su deseo de escucharlos sonar era la motivación para no engrasarlos.
Además, él entendió que es muy aburrido seguir las huellas de un largo camino sin nada que le entretenga.
Al igual que Yupanqui, muchos de los que no tienen en quien pensar, no necesitan silencio y por esas razones nunca engrasarán los ejes de su carreta.
Sin criticas y sin bulla en abundancia, fue aprobada por el Congreso Nacional de la República Dominicana, la Segunda Enmienda a la Constitución del 2010.
No solamente porque el proponente de la enmienda tiene en quien pensar fue que propuso engrasar los ejes de la Carta Magna, sino porque el presente, es un tubo de ensayo con el que los próximos 47 meses se veran las pruebas de aceptación de una decisión contundente.
.
Comentarios
Publicar un comentario